SAPO/RANA
Localización: Sagrada Familia
Barcelona (España)
Análisis Iconográfico: Se observa una figura de un batracio
o rana en actitud
descendente sobre dos tubos, su boca está abierta, obvio debido
a su función, y sus manos y patas terminan en garras con uñas de gran tamaño, no se observa
la representación palmípeda
de las mismas, por lo que tal vez se presente de manera más fiera en su aspecto.
Análisis iconológico: La rana está íntimamente relacionada con los primeros elementos que la definen desde su nacimiento, elementos primordiales como el
agua y la tierra, por tanto
su significado iconológico girará en torno a la relación y simbiosis entre ambas materias primeras.
Según Pérez Rioja en su diccionario de símbolos y mitos la definición de rana
es… “Ranas: En opinión de Schnneider, las ranas –por el hecho de ser animales anfibios- son un símbolo de la tierra fecundada por el agua. En la simbología cristiana se ha otorgado a la rana (a causa de su continuo croar) una significación diabólica.
Ha sido comparada con los herejes y con los pecadores y en general se le considera símbolo de los mundanales y fugitivos placeres. En la teoría psicoanalítica, ranas y sapos – pese a la repugnancia que despiertan- tienen como seres oníricos, una significación positiva. En la rana se experimenta más lo ágil y
vivaz; en el
sapo, lo pesado y lo torpe”.68
Las distintas
culturas ancestrales consideran a la rana como un animal lunar, por desarrollar parte de su actividad de manera nocturna, concediéndole su cualidad anfibia, al mismo tiempo, connotaciones simbólicas diversas. En ese
sentido, fábulas, leyendas
y cuentos, relacionan al citado batracio con la luna, su nacimiento y diferentes ritos, para la petición
de lluvia en tiempos de sequía. Siendo
considerado como un elemento
simbólico, que representa el paso o la transición de la materia
agua al elemento tierra, con lo que se convierte, para algunas
tradiciones de sólida cultura simbólica en un principio pasivo, como puede ser en la tradición china, siendo sin embargo en Japón y su cultura,
portadora de buenos augurios, simbolizando la alegría, además de representar
la buena suerte.
Los Pueblos
del valle del Indo
le atribuyen un significado cargado de dualidad y ambivalencia,
controvertidos, por un lado, simbolizaría las tendencias materiales, interesadas y ocultas de la vida, por el otro, se la reconoce como representante de la procreación y de la energía que emerge de la madre tierra.
Figs.-Distintas representaciones de la Diosa Hept o Hequet.
Los Egipcios
consideraban a la rana como un atributo
de sus diosas y se le asociaba con los ritos de resurrección de Osiris, en la mitología
egipcia era la diosa
Herit que ayudó a Isis a recomponer el cuerpo destrozado de Osiris y después le insufló el hálito de la vida, simbolizaba la vida nueva siendo éste el
atributo de Isis, protectora
de las madres y de los recién nacidos, la diosa con cabeza de rana,
en Egipto, se asociaba con las aguas primarias de la creación,
se confeccionaban talismanes de jade, de bronce, siendo al talismán
de la diosa Hept, al que se le atribuían
poderes para conservar la fidelidad de las parejas y
la prosperidad.
49 PÉREZ-RIOJA, J.A. (1997) (5ª Edición).
“Diccionario de símbolos y mitos”. Ed. Tecnos S.A. Madrid. Pag. 364-5.
Siendo en el medievo, cuando se le considerará como un animal cargado de connotaciones ocultas y místicas, asociándolo
con el mundo de la magia y de la brujería. Considerándolo por tanto el cristianismo
como un signo del demonio y de lo diabólico, a la vez que claro representante de la lujuria, la Biblia,
las cita tan sólo en
dos ocasiones y en ambas representa la podredumbre y
lo
maléfico, la primera cita
en el
Éxodo…”...Y el río
criará ranas, las cuales subirán y entrarán en
tu casa,
en la
cámara donde duermes,
y sobre tu
cama, y en las casas de
tus siervos,
en tu
pueblo, en
tus hornos
y en tus artesas. Y las ranas subirán sobre ti, sobre tu pueblo, y sobre todos tus siervos.”
(Ex. 8:3.). Al ser la rana un ser impuro, representa la cultura y la comida que Dios da al faraón,
para que entienda que ésta es la que se come su reino, esto es comida impura, que alimenta
como un veneno y mata espiritualmente
a su pueblo, representando por tanto la soberbia ante Dios, lo que equivale a estar en guerra contra él, siendo por tanto la antesala del Armagedón bíblico apareciendo por segunda vez la rana ”...Y vi salir de la boca del dragón,
y de la boca de la bestia, y de la boca del falso profeta, tres espíritus inmundos
a manera de ranas; Pues son espíritus
de demonios, que hacen señales, y van a los reyes de la tierra en todo el mundo, para reunirlos
a la batalla
de aquel gran día del Dios todopoderoso. He aquí, yo
vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela, y guarda sus ropas, para que no ande desnudo, y vean su vergüenza. Y los reunió en el lugar que en hebreo se llama Armagedón.” (Ap.16:13.). A pesar de todo, entre sus muchos significados, dada su dualidad,
tenía como símbolo
para los cristianos, el de la resurrección, mientras el sapo, las náuseas frente al pecado y portador de muerte, extinción y mundo subterráneo.
Fig-Sapo en la Sagrada Familia, barcelona, España.
Muchas otras culturas
europeas atribuyen a la rana propiedades salutíferas, usándolo de forma ritual, ante dolores persistentes e intensos, pensando en transferir el mal de la persona
al cuerpo de la rana. Tal es su simbolismo
que algunas tribus guerreras cosían a su vestimenta pieles de rana, para hacerlas
más resbaladizas e incluso azotaban, en la ribera
del río Orinoco
una manada de ranas, con objeto de provocar la lluvia, creyéndolo por su relación
de éste animal con su simbolismo acuático.
En Salamanca
tenemos un claro ejemplo de dobles significados para éste
batracio, es en la Universidad de Salamanca donde sobre uno de sus pórticos, se encuentra representada una calavera con un batracio
en su cabeza.
Fig. -Rana sobre calavera, Universidad
vieja de Salamanca.
La rana es por excelencia,
el símbolo de la lujuria, que suele representarse como una mujer con una rana posada sobre el sexo, por lo que fácilmente podríamos interpretar como la imagen de la muerte motivada por el vicio de la lujuria,
teniendo una “posible” interpretación con que haga referencia al príncipe Juan, hijo de los Reyes Católicos, muerto a los 19 años de edad, por
abusar del “débito conyugal”, que unido a la mala salud endémica del infante, hizo que falleciera en los ardores con Margarita de Austria,
su esposa. También
nos encontramos en Oviedo en la Catedral
de san Salvador, una figura que por sus rasgos nos recuerda a un sapo, de gruesa cabeza, con gran boca y papada con
la cabeza retirada
hacia atrás y con un cuerpo redondo y rechoncho con músculos remarcados, que recuerda a una mezcla entre humano y batracio ya que sus manos
terminan en dedos unidos
con membranas, se encuentra sentado en el borde, con una mano en la rodilla
izquierda y la otra en la zona donde
estaría el sexo, por lo que fácilmente podríamos relacionarla con un acto de onanismo o de masturbación, hecho reforzado
por relacionar éste ser con un
sapo o rana animal que como ya hemos visto está íntimamente relacionado
con la lujuria. Según podemos leer en el libro de la “Brujería asturiana”69
49 Cf. Francisco
Vicente CALLE CALLE, Gárgolas ...., pp. 36-37. En la sillería de la catedral
ovetense existe un apoyamanos
en el que se representa a un hombre desnudo masturbándose. Cf. Dorothy y Henry KRAUS, op. cit., p. 85, fig. 60.
Fig. -Gárgola de la Catedral de san Salvador de Oviedo. (España).
Una de las
brujas que figura en la relación
del inquisidor Alonso de Salazar, cuenta que de su trato con el demonio, nacían sapos”, (…) “Cuando nuestras
uniones fructificaban, nosotros parimos sapos”, “En 1615 una vieja que vivía en Pasajes y a quien llamaban
la Mariculoca fue arrojada del pueblo a pedradas por los propios niños a quienes ella pretendía
llevar al aquelarre. Una de las criaturas a quien logró engañar regalándole
nueces, contó que
la vieja lo recogía en la cama y llevaba al “puesto”,
le entregaba una “vara blanca” y lo tenía
guardando sapos al amanecer”70.
49 Cf. Elviro MARTÍNEZ, op. cit., p. 97. Sobre la lujuria
y la rana, ver Luis CORTÉS VÁZQUEZ, Un enigma salmantino. La rana universitaria. Salamanca, 1978,
Gráficas Cervantes,
pp. 29-ss.; Maximino PANDO MACÍAS, op. cit., 59-60; « Le symbolisme du bestiaire medieval sculpté » Dossier
de l’art, nº 103, janvier 2004, p. 49. En este último artículo se señala que según algunos autores como Isidoro de Sevilla o Santiago de la Vorágine,
el sapo se generaba en el cerebro o en los genitales
de un cadáver humano. También se le considera la encarnación de la fealdad pues es un animal asqueroso y horrible,
hinchado y venenoso, que además
se arrastra por el suelo. Con todas estas características no es de extrañar que desde muy antiguo fuera visto como un animal negativo y posteriormente como una de las encarnaciones típicas del diablo.
Fig. -Gárgola en el Duomo o Catedral de
Milán (Italia).
No obstante a lo largo del libro veremos distintas representaciones del sexo y la lujuria y sus distintas
maneras de representarlo en la estatuaria gargolaria de las catedrales y conventos, incluso en la misma dispondremos de un capítulo
entero sobre el sexo en el
medievo y su representación iconográfica
y simbólica.
Otra representación de la dominación de la lujuria
mediante la palabra
de Dios y su contenido lo veremos en la rana que cuelga en la fachada de la Catedral
de Milán, en el Duomo podemos
observar una rana
que lee en un libro abierto, como
ya hemos referido, la rana era símbolo
de lujuria, pero también
de resurrección, ambos significados podemos unirlos al de que con la palabra, representada por el libro y su conocimiento, el libro está abierto, (En la hagiografía cristiana nos encontramos con que multitud de santos se representan con un libro en sus manos, si el libro está cerrado, es que son mero vínculo de la palabra, como el hombre verde que de la palabra
extiende la misma
con sus frutos o vegetaciones que se extienden más allá de su cuerpo y si está abierto implica, que no sólo es portador de la misma sino también intérprete y autor de la palabra divina, así los evangelistas, se representan siempre
con su forma zoomorfa
y con el libro abierto, también
los profetas y sibilas se reproducen
de ésta manera por ser conocedores del designio divino y así comunicarlo.
Fig-Gárgola de rana en la Sagrada familia, Barcelona, España.
En éste
caso que nos ocupa la rana, signo
de la resurrección en los primeros cristianos y del resurgir
de la nueva vida (recordemos el mito de Osiris y la
intervención decisiva de vuelta a la vida mediante el hálito vital de Hept, la diosa
rana) nos simboliza, que mediante
el conocimiento de la palabra
de Dios es posible renacer a una nueva vida, a través de su conocimiento e interpretación.
Fig. -Gárgola sobre pez en san Juan de los Reyes, en galería Sur,
Toledo (España).
En ésta Gárgola observamos en primer lugar, una rana a punto
de saltar sobre un gran pez, aunque
por el tipo de representación podíamos
hablar de un delfín, que por su rapidez y habilidad en el agua, no se deja burlar por ninguna ilusión o tentación, siendo su simbología la de nexo de unión entre todos los seres
humanos en un mismo pensamiento, símbolo de carácter universal como
el maestro que conduce
al grupo de fieles entre
las aguas primordiales y salva los
obstáculos del camino como son el pecado y las tentaciones por parte del mal, éste
animal fue consagrado a Apolo, el dios de la luz y a Dionisios
como dios de los marineros, sin olvidarnos que también
lo fue a Afrodita nacida
de la espuma del mar, siendo
por tanto Poseidón su protector y celador de su fortuna.
Para la simbología griega y romana,
el delfín representaba al hombre en unión
con el cosmos, el hombre
que había sacrificado lo material, atravesando
todas las aguas con su astucia y saliendo bien parado de todos los males, siendo por ello, por su capacidad de eludir todos los escollos, que lo consideran
éstas culturas como portador de almas y por ello, conectando con la simbología cristiana, lo
referencia con la figura de Jesucristo.
La rana o sapo que porta, sin embargo representan
el ego y la soberbia,
representando su mutación
con su propio cambio físico y de medio de cuando
pasa de renacuajo a rana antes en un medio acuoso, ahora en uno terrenal,
por lo que también simboliza
al cambio experimentado por el iniciado
al ser enseñado por el maestro que lo lleva, lo porta entre los distintos engaños del desconocimiento.
En Alquimia
el pez, es la sustancia arcana u origen de la conservación de la vida y por ello la comida
sacramental de todas las religiones mistéricas, siendo, por tanto el primer principio, el sapo en cambio, es el lado oscuro de la naturaleza, sus heces, su hediondez y su forma terrenal lo hace la materia terrosa
de la que dice Avicena…”Unid el sapo de la tierra con el águila y veréis en nuestro arte el magisterio…”71
49 AVICENA- (1981) “Tres escritos
Esotéricos” Ed.Tecnos.
Fig.-Gárgola de sapo en la Sagrada Familia Barcelona, España.
Este texto ha sido extraido de la tesis de este mismo autor de título "Gargolarium: Estudio iconológico e iconográfico de la estatuaria gargolaria de España y los paises de su entorno", publicada en 2015 por Editorial Círculo Rojo en Almería.
Tesis leida en 2012 y que le valió la calificación de sobresaliente cum laude.
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